La Justicia santafesina autorizó este viernes el traspaso de las acciones de Vicentin S.A.I.C. al Grupo Grassi, un paso clave dentro del extenso proceso judicial que atraviesa una de las principales empresas agroindustriales del país desde su colapso financiero. La medida fue dispuesta por el Juzgado Civil y Comercial de Segunda Nominación de Reconquista, a cargo del juez Fabián Lorenzini, y se inscribe en el marco de la resolución homologatoria del acuerdo concursal.
Según informó oficialmente el Grupo Grassi en un comunicado difundido este viernes, la decisión judicial hace efectivo el traspaso accionario de Vicentin S.A.I.C. a Grassi S.A., lo que implica también la conformación de un nuevo directorio. El mismo estará presidido por Mariano Grassi, con Leandro Salvatierra como vicepresidente y Hugo A. Grassi como director.
Desde la empresa destacaron que este acto “marca un paso formal muy significativo” y simboliza el inicio de lo que denominaron la “Nueva Vicentin Argentina”, un proyecto que busca reconstruir la compañía a partir de su estructura industrial, el capital humano y el impulso de un grupo empresario con integración 100% de capitales argentinos.
Vicentin atraviesa una profunda crisis desde fines de 2019, cuando declaró el cese de pagos con un pasivo millonario que involucró a productores, cooperativas, bancos nacionales e internacionales y al propio Estado. El default dio lugar a uno de los concursos preventivos más grandes de la historia económica argentina y abrió un proceso judicial complejo, atravesado por disputas societarias, investigaciones penales y fuertes debates políticos y económicos.
A lo largo de estos años, la empresa logró sostener parcialmente su actividad industrial y operativa, principalmente gracias al esfuerzo de sus trabajadores y acuerdos transitorios con distintos actores del sector. Sin embargo, la falta de una definición estructural sobre su conducción y capitalización mantuvo en vilo a toda la cadena agroindustrial, especialmente en el norte santafesino.
En este escenario, el Grupo Grassi emergió como una de las alternativas para garantizar la continuidad de la empresa en el marco del concurso, proponiendo una salida que permita preservar las unidades productivas, los puestos de trabajo y la operatoria exportadora. La homologación judicial y el traspaso accionario representan ahora la concreción formal de ese esquema.
En el comunicado que lleva la firma del presidente del Directorio, Mariano Grassi, se subrayó que la nueva etapa estará “signada por el trabajo, el compromiso, la transparencia y el crecimiento”, y afirmó que el objetivo es que NV Argentina se convierta en un actor relevante del sector agroindustrial, con una visión asociativa que potencie a toda la cadena agroexportadora.
Asimismo, el flamante presidente remarcó el rol del personal de Vicentin, al destacar “el compromiso y la capacidad de su gente, que fue capaz de mantener en tiempos tan difíciles el funcionamiento y la operatividad de la compañía”.
Con el control accionario ya autorizado, se abre ahora una etapa decisiva con la implementación efectiva del nuevo esquema de gestión, la normalización financiera y la reconstrucción de la confianza con acreedores, proveedores y mercados. El desafío no es menor, pero el fallo judicial marca un punto de inflexión en una historia que tuvo en vilo al entramado productivo de la región y al complejo agroexportador argentino.