Argentina, 12 de diciembre del 2025.- La obra salesiana llegó a Argentina en diciembre de 1875, por lo cual está celebrando su 150º aniversario. Un siglo y medio dedicado a acompañar a niños, adolescentes y jóvenes, especialmente aquellos en situación de mayor vulnerabilidad.
El sacerdote italiano Giovanni Bosco, más conocido como Don Bosco, fundó la Congregación Salesiana el 18 de diciembre de 1859, dando institucionalidad a un programa educativo y social novedoso. Al recorrer las calles y las cárceles de Turín, con el dolor de encontrar a tantos jóvenes desamparados, se preguntaba qué sería de ellos si tuvieran un amigo, alguien que se preocupara por ellos. Decidió ser ese amigo.
Desarrolló una pedagogía conocida como “sistema preventivo”: educación integral de los jóvenes en un ambiente educativo de cercanía y confianza, donde se sientan queridos y aceptados. El eje pasó del castigo a la prevención; Don Bosco transmitió la convicción de que en todo joven hay una fibra sensible al bien. Impulsó el Oratorio como propuesta distintiva, un espacio formativo, de juegos y oración; además de promover la formación laboral. Lo hizo junto a muchos colaboradores, sacerdotes y laicos, incluyendo a su propia madre, “Mamá Margarita”, considerada co fundadora de la Familia Salesiana. La misión de su obra era, y es, “formar buenos cristianos y honrados ciudadanos”.
Si la obra iniciada por Don Bosco fue novedosa y pionera en Italia, lo propio ocurrió en Argentina. El 14 de diciembre de 1875 llegaron los primeros misioneros salesianos, en la primera expedición de la Congregación fuera de Europa.
Primero alojados en la ciudad de Buenos Aires y San Nicolás de los Arroyos, donde atendían a los inmigrantes, llegaron muy pronto a la Patagonia, donde la red misionera y escolar de la Congregación Salesiana comenzó a configurarse antes de la presencia del Estado Nacional y de la organización eclesial. Incluyó la construcción de un sistema educativo compuesto de escuelas primarias y secundarias, escuelas de artes y oficios, escuelas agrarias e internados; además del aporte científico, cultural y literario, y el encuentro intercultural con los pueblos originarios.
En la actualidad, la obra de Don Bosco tiene presencia en 22 provincias argentinas, haciendo de su extensión territorial y su prolongada trayectoria dos de sus diferenciales.
Dentro de la Congregación, Por los Jóvenes - Don Bosco (o Procura Misionera Salesiana) se encarga de comunicar las acciones de la obra y recaudar fondos para sostener muchas de ellas, especialmente en las zonas más vulnerables. Esto lo hace gracias al apoyo de donantes individuales y alianzas con empresas y otras organizaciones, ya sea con apoyo económico, acciones de voluntariado, venta de productos elaborados en escuelas agrotécnicas salesianas y otras propuestas.
Por los Jóvenes - Don Bosco trabaja en cuatro ejes, desde los cuales sigue brindando oportunidades y apoyo social y educativo a las poblaciones más postergadas, especialmente jóvenes. Esos ejes son inclusión educativa, formación para el trabajo, acciones socio comunitarias; y acciones misioneras y pastorales.
Para conocer más sobre la organización, se puede visitar su web: www.porlosjovenes.org, encontrarlos en redes sociales como Por los Jóvenes y escribir a info@porlosjovenes.org.