Crédito: INTERNET
Ernesto Rodríguez contaba 49 años de edad, y se comportaba como subjefe del cuerpo de Bomberos Voluntarios de la santafesina ciudad de Capitán Bermúdez, y falleció al recibir un disparo en la cabeza cuando se hallaba en su domicilio.
Hasta dicho lugar arribaron tres malvivientes en un automóvil, y uno de ellos lo ejecutó en un escenario donde se encontraron siete vainas servidas.
Más tarde, en una zona cercana al cementerio fue ubicado el vehículo utilizado por los delincuentes, y en su interior los uniformados actuantes hallaron un revólver calibre 380.