Se estima que se sembrarán 465.000 hectáreas con el cereal de invierno en el centro norte santafesino, un 6% más que en el ciclo anterior y la mejor intención de siembra de la última década, según el informe del Sistema de Estimaciones Agrícolas que difunde la Bolsa de Comercio de Santa Fe.

Las condiciones climáticas se revirtieron como consecuencia del ingreso de un centro de alta presión que originó estabilidad y un importante descenso de la temperatura, que favorece además la humedad ambiente para la cosecha del grano.

Este cambio permitió un intenso y significativo avance del proceso de cosecha, en los departamentos del sur y centro del área de estudio, no así en los del norte, donde persistió la inestabilidad con elevados contenidos de humedad ambiente, de grano o de los suelos.

ARRANCÓ LA FINA

Bajo óptimas condiciones ambientales y con disponibilidad de agua útil en el perfil de suelo, se inició la campaña 2024/25, que estima una intención de siembra de 465.000 ha, 28.500 ha más que la superficie implantada en 2023, lo cual se incrementa alrededor del 6 % intercampaña.

CÓMO VIENE LA TRILLA

Las condiciones del clima mejoraron y paulatinamente se pudo entrar con las maquinarias a los predios, en una cosecha que está retrasada y solo tiene un grado de avance del 68 %, casi un 30% por detrás del mismo período del año pasado.

En el sector sur, los rendimientos promedios mínimos obtenidos fueron desde 28 a 30 qq/ha, con máximos de 40 a 45 qq/ha y en lotes puntuales se alcanzaron 52 qq/ha. Grado de avance 90 %, con un progreso intersemanal de 22 puntos.

En el sector centro, los rendimientos promedios mínimos obtenidos variaron desde 18 - 20 - 24 qq/ha, con máximos de 38 a 42 qq/ha y en lotes puntuales se contabilizaron 50 qq/ha. Grado de avance 75 %, con un progreso intersemanal de 21 puntos.

En el sector norte, los rendimientos promedios mínimos obtenidos variaron desde 10 - 12 - 14 qq/ha, con máximos de 17 a 22 qq/ha y en lotes puntuales se contabilizaron 28 qq/ha. Grado de avance 35 %, con un progreso intersemanal de 17 puntos. La continuidad de la inestabilidad climática, nuevamente incidió en el estado de los sojales en etapa de madurez fisiológica, por lo se constataron pérdidas de calidad en los granos, algunos manchados e incluso brotados y presencia de patógenos, hongos.

En tanto, el proceso de cosecha de la soja tardía (de segunda), continuó lentamente, siempre condicionado por las características ambientales y la disponibilidad de equipos o cosechadoras. En el área en que se concretó la actividad, los resultados fueron muy alentadores con respecto a los rendimientos promedios obtenidos en el 2023, especialmente en los departamentos San Martín, San Jerónimo, centro sur de Castellanos, Las Colonias y La Capital. A un 80 % de los sojales se los detectó en estados buenos, muy buenos o excelentes.

EL MAL TRAGO DEL MAÍZ TARDÍO

Los maizales tardíos (de segunda), mostraron claramente el daño provocado por la presencia de Spiroplasma kunkelii, su vector la chicharrita del maíz (Dalbulus maidis), cuya expansión fue tan dinámica que originó escenarios muy complejos y sin antecedentes. Los rindes paupérrimos indican que se obtiene rendimientos promedios que no superan los 30 qq/ha, de muy mala calidad.