Rural

Concluyó la cosecha de maíz de primera y mejoran rindes de soja

FOTO BOLSA DE COMERCIO DE SANTA FE TRILLA. La cosecha de soja ya alcanzó el 45% de la superficie sembrada en el centro norte santafesino.

El ciclo del maíz de primera correspondiente a la campaña 2017/2018 se dio por finalizado en los departamentos del centro oeste de Santa Fe con un balance que refleja en cierta medida el impacto de la sequía que afectó la región durante gran parte del verano. Así, el cultivo registró un área sembrada de 78.000 hectáreas, una superficie cosechada (grano comercial) de 56.500 ha con un rendimiento promedio de 76,0 qq/ha y una producción de 429.380 toneladas según el último informe del Sistema de Estimaciones Agrícolas (SEA) que elaboran semanalmente la Bolsa de Comercio de Santa Fe y el Ministerio de la Producción de la Provincia. Además, se verificó una pérdida consolidada de la producción de 18% sostiene el reporte que abarca los departamentos del centro norte santafesino, entre ellos Castellanos. 

En la última semana, las condiciones climáticas de inestabilidad y precipitaciones se concretaron en todos los departamentos del área de estudio. Nuevamente la particularidad radicó en la intensidad de las lluvias, la que permitió una buena a muy buena infiltración en los suelos del total de agua caída, considerándose un 100% de eficiencia y óptima instancia de recuperación y recarga de los perfiles, tras el período seco. 

En este escenario, los equipos y cosechadoras estuvieron en movimiento y continuó el proceso de cosecha de los cultivos. Los rendimientos en cada uno de ellos siguen revelando una gran heterogeneidad, siendo la principal característica de la campaña 2017/2018.

En relación a la soja temprana o de primera, la inestabilidad y las precipitaciones que se produjeron en toda el área durante 2 a 3 días, con altos porcentajes de humedad ambiente, incidieron directamente en el ritmo de recolección, deteniéndose en ese período. Luego, a medida que las condiciones lo fueron permitiendo, se reanudó gradualmente el mismo, logrando un grado de avance del orden del 45 %, representando aproximadamente unas 405.000 ha.

Los rindes fueron consolidándose y levemente incrementándose, siendo los mismos variables y heterogéneos. En los departamentos del norte del área de estudio los rendimientos promedios obtenidos fluctuaron entre 10 y 25 qq/ha; en los del centro entre 20 y 37 qq/ha, con lotes puntuales de entre 40 y 55 qq/ha; en los departamentos del sur oscilaron entre 38 y 47 qq/ha, con lotes puntuales de 60 qq/ha.

Se estimó una reducción del 17% en el rendimiento promedio del área, el que fluctuaría entre 29 y 29,5 qq/ha, reduciéndose de 6 a 6,5 qq/ha comparados con la campaña anterior, que en dicho cultivo fue de 35,5 qq/ha.

Asimismo, el informe puntualiza que la baja incidencia y presión de los insectos, como así también las plagas en los cultivares desarrollados, solo en lotes o sectores puntuales, fue una particularidad y característica de importancia que reinó en la campaña 2017/2018 de los cultivos. Al respecto, han tenido mayor impacto y resistencia las malezas, revelando un comportamiento más resistente y planteando desafíos para las futuras siembras.

En cuanto a las condiciones climáticas que van para la corriente semana hasta el 24 de abril de 2018, los pronósticos prevén desde el inicio hasta el final del período alto porcentaje de humedad y cierta inestabilidad que se iría incrementando día tras día, al igual que la nubosidad y altas probabilidades de precipitaciones en toda el área, desde el domingo 22 en adelante. Las temperaturas medias diarias fluctuarían entre mínimas de 19 a 23 ºC y máximas de 23 a 32 ºC.

Las previsiones climáticas descritas podrían condicionar la realización de las diferentes actividades en los distintos sistemas productivos, en el área con inestabilidad climática.


SORGO

La humedad del grano del sorgo, que estuvo con valores relativamente altos, y la inestabilidad climática manifestada, fueron las causas que incidieron directamente en el proceso de cosecha, el cual continuó muy lentamente, con un grado de avance del orden del 50 %, avanzando unos 3 puntos en la semana.

Se mantuvo una diferencia significativa diferencia en los rendimientos promedios obtenidos, que fluctuaron entre 20 y 55 qq/ha. La condición sanitaria hasta la fecha fue buena y baja la presión de insectos y enfermedades en los cultivares.


SOJA TARDIA

La inestabilidad y las nuevas precipitaciones que se registraron en la semana cubrieron las necesidades de los cultivares de soja tardía, en las distintas etapas fenológicas en que se encontraron.

Los indicadores que se observaron fueron: poco desarrollo de estructuras y stand de plantas, bajas alturas, entresurcos no cerrados, no uniformidad de lotes y mortandad de plantas; además de problemas de crecimiento y generación de hojas (área foliar) en algunos lotes. Dichas características serían irreversibles a pesar de las lluvias.

Ante esto, un 80 % del área sembrada presentó diferentes grados de afectación, situación que redundaría en el deterioro de los cultivares y se verían reflejados en los resultados finales.


MAIZ TARDIO 

Un cambio experimentaron los cultivares del maíz de segunda, particularmente en la coloración de las hojas y su turgencia, consecuencia de la disponibilidad de agua útil luego de las precipitaciones, pero otros indicadores como el bajo desarrollo en altura, estructura y uniformidad de plantas, lotes desparejos y stand de plantas por ha, no cambiaría.

Un 80 % del área sembrada, presentó estado regular, dicha superficie manifestó distintos grados de afectación y síntomas característicos del estrés hídrico y térmico. El porcentaje restante en estado bueno y con bajas consecuencias.

Autor: REDACCION

Estás navegando la versión AMP

Leé la nota completa en la web