El Congreso de CONINAGRO desarrollado ayer en Capital Federal contó con la participación de funcionarios importantes como el gobernador de la provincia Axel Kicillof y el jefe de Gabinete de la Nación, Guillermo Francos.
Precisamente, el portavoz y referente del Gobierno libertario ponderó las políticas oficiales orientadas a la producción agropecuaria y reconoció que la reducción de impuestos ha sido clave para el salto productivo.
Dentro de las medidas más destacadas en favor del sector, el funcionario mencionó la reducción de derechos de exportación sobre productos como carne, maíz, soja, trigo, cebada, girasol y sorgo; el aumento de créditos del VICE; la eliminación de precios máximos para la ganadería; la apertura para exportar ganado en pie; y la importación de vacunas a menor costo, que alivió los gastos sanitarios.
El ministro enfatizó la importancia de la producción agropecuaria para Argentina y el mundo, y aseguró que “se produce alimentos para el mundo, y eso nos debe llenar de orgullo”. Además, señaló que el país se encuentra en una “encrucijada” y que la actual administración apuesta a un modelo distinto, basado en el equilibrio fiscal como clave para fomentar el crecimiento, bajar impuestos y aumentar la producción.
El mensaje del Gobierno fue de optimismo, asegurando que, a pesar de las dificultades, la intención es avanzar con políticas que den relevancia al sector agroindustrial en la generación de riqueza nacional, acompañadas de una reducción progresiva de cargas tributarias.
UN MENSAJE DE OPTIMISMO
En el final, Francos intentó dejar un "mensaje de optimismo" al auditorio de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, colmado por productores y empresarios cooperativistas.
"Sé que estamos pasando nubarrones y tormentas, pero el Gobierno está convencido hacia dónde va. Lo demás es volver al pasado. Tenemos la macroeconomía ordenada, sabemos que debemos mejorar y ver muchas cosas, pero volver al pasado es ir hacia un proyecto frustrado de país que no va para ningún lado".
LA VISIÓN COOPERATIVISTA
El presidente de CONINAGRO brindó su discurso y reconoció que “el campo argentino está atravesando un cambio de época sumamente importante, no solo a nivel productivo y tecnológico, sino también a nivel mercados”. Y agregó: “lo que no tengo ninguna duda, que si disponemos de las herramientas necesarias podríamos transformarlo en una gran oportunidad”.
Más allá de las turbulencias que enfrenta el Gobierno nacional, el dirigente renovó un voto de confianza en materia económica: “está poniendo en funcionamiento un sistema de déficit cero. En esto no podemos dejar de decir que coincidimos con una economía ordenada porque es sumamente importante para todos”.
Y concluyó: “es necesario que los gobiernos en todos sus estamentos entiendan, compartan e incentiven para que esto ocurra teniendo siempre presente que `disentir, no es una declaración de guerra´ y ´coincidir, no es un acto de obsecuencia´”.