El Fideicomiso administrativo y financiero que se conformó para encarar la nueva etapa de rescate de la cooperativa láctea SanCor, que por el momento conforma un variopinto grupo de empresarios nacionales, tiene la intención de entrar al mercado bursátil con Valores Representativos de Deuda (VRD), para conseguir parte de los 60 millones de dólares que necesita el fondeo para empezar a operar la nueva administración.
Esto se precipitó aparentemente, ante la negativa del Banco Nación de poner todo el capital que el Fideicomiso pretende. Según se supo extraoficialmente, los títulos tendrán cotización pública para poder ser suscriptos por inversores privados, sumado a los fondos que prometió el gobierno nacional para apoyar la iniciativa del rescate a la cooperativa. SanCor, en tanto, respaldará con sus activos la operatoria de inversión.
Según el periodista rosarino especializado en mercados bursátiles, Mariano Galíndez, “de la preparación de los VRD, que es un proceso muy riguroso, están participando en su confección empresas de mucho prestigio en el mercado”, como por ejemplo, “First Capital Group, especializada en finanzas corporativas que en los últimos años estructuró más de 1.400 operaciones securitizadas por más de $ 100.000 millones”.
La otra aseguradora involucrada es el estudio de abogados “Nicholson y Cano, que es el principal estudio jurídico del país en asesoramiento de empresas que incurren en el mercado de capitales”. También se ha mencionado el banco Bice como fiduciario de los VRD. Con todo ello, se buscar llevar garantía y tranquilidad a los inversores para que no surjan suspicacias de ningún tipo, tratándose de planes que provienen de empresarios con poca o nula trayectoria en el sector lácteo productivo y porque el caso en cuestión lleva el nombre de la siempre endeble SanCor.
Según la misma fuente, “hay dos calificadoras de riesgo internacional que analizarán el producto estructurado, y precisamente, cuando se termine la etapa de cumplimiento de requisitos y condiciones, los VRD serán enviados a la Comisión Nacional de Valores (CNV) para su aprobación”.
PARA EVITAR SOSPECHAS
Al parecer, el uso de VRD y la oferta pública de los bonos, garantizada por los involucrados en su confección, fueron los requisitos que el Banco Nación y el Gobierno les solicitaron a los empresarios del fideicomiso para poder avanzar en el préstamo más importante que necesita el “nuevo plan SanCor”. Este acuerdo entre los empresarios impulsores del fideicomiso y el Gobierno nacional fue necesario para diferenciarse del escandaloso financiamiento que tuvo Vicentin en la misma banca manejada por la administración Macri.
Desde SanCor, en forma reservada, admiten que todo esto está sucediendo tal cual se informa pero que la cooperativa no forma parte de este juego bursátil, ya que eso corresponde a una iniciativa del grupo empresario y los operadores del Gobierno que apoyan esta idea.
El fideicomiso entonces creará esta instancia en la Bolsa para colocar títulos de deuda que tendrán el respaldo de los activos de SanCor, para muñirse de los recursos iniciales que luego completará un préstamo del Banco Nación. De esta manera la banca pública se asegura que los fondos no caigan en saco roto y que el financiamiento también provenga del ámbito privado, comprometiendo a los integrantes del Fideicomiso en la reestructuración del pasivo y la nueva etapa de SanCor.