La Influenza Aviar genera cada vez más preocupación en las esferas gubernamentales, teniendo en cuenta el enorme impacto (negativo) que puede tener la afectación del estatus sanitario. Precisamente, para preservarlo y garantizar el normal flujo de exportaciones, el Gobierno nacional decidió reforzar el plan de acción para evitar que la enfermedad ingrese al circuito comercial.
Desde el SENASA han manifestado su compromiso para llevar adelante las tareas de prevención correspondientes, pero mantienen la guardia alta. Así lo reconoció el vicepresidente del organismo, Rodolfo Acerbi, que explicó los ejes de trabajo que se llevan a cabo en varias regiones del país, pero puntualizando particularmente en dos.
“Es una enfermedad que vuela y tenemos un tránsito vecinal fronterizo de gente de países limítrofes que puede mover animales, huevos o derivados y no sabemos el estatus sanitario. Vamos a extremar las medidas”, admitió. Y agregó: “estamos luchando fuertemente en una línea migratoria central que pasa por el este de Córdoba y el oeste de Santa Fe”
Por otro lado, advirtió que hay tres escenarios posibles respecto a la enfermedad. “Un escenario de vía silvestres, un escenario doméstico (de crianza de aves para autoconsumo familiar) y un tercer escenario que es el comercial”, remarcó. Al tratarse de una enfermedad que transmiten las aves silvestres, señaló que “no se puede subestimar”.
“En el caso del primer escenario, es muy importante que cualquier persona que sale de turismo o sale a pescar por una laguna cualquier ave muerta es una sospecha que se debe notificar. En el segundo escenario, de traspatio, las familias tienen que mantener los gallineros cerrados para que no tomen contacto con otros animales silvestres. En estos dos escenarios estamos trabajando ahora”, expresó. Y aclaró: “el tercer escenario que es el que tenemos que preservar como nuestra gran joya, que es el ámbito comercial, lo tenemos que cuidar reforzando las medidas de seguridad, atendiendo cualquier mortandad que sea fuera de lo normal”.
“UNA LUCHA CUERPO A CUERPO”
La presidenta del Senasa, Diana Guillén, también se refirió a la situación actual y manifestó que “el éxito de todo el trabajo es poder detectar lo más rápido que podamos las aves que puedan estar afectadas para que desde el organismo podamos proceder con las medidas de control que se deben realizar cuando aparece los focos”.
Al respecto, reflexionó: “es una lucha cuerpo a cuerpo, la comunidad y los organismos nacionales y provinciales están colaborando con nosotros avisando donde aparecen aves muertas o con sintomatología. Queremos destacar que no se contagia la enfermedad si no se manipula un animal enfermo, lo que deben hacer inmediatamente es avisar al Senasa que los retirará con medidas de seguridad para analizarlas en nuestro Laboratorio Nacional".
MÁS MEDIDAS
Las nuevas medidas anunciadas se suman a las ya implementadas en el marco de la emergencia sanitaria declarada por el Senasa, a través de la resolución 147/23: rastrillaje de las zonas de los focos en aves silvestres y traspatio para identificación de otras aves enfermas; refuerzo de los controles y las acciones de vigilancia epidemiológica en los puestos de frontera, en todos los pasos fronterizos, con Chile, Bolivia y Uruguay; desinfección de vehículos, control de pasajeros; movilización de agentes especializados en aves y manejo de emergencia de otras dependencias o centros regiones del Senasa, hacia las oficinas ubicadas en las fronteras; continuidad en las campañas de sensibilización para notificación temprana; concientización, capacitación y recomendaciones para el esfuerzo en las medidas de bioseguridad en granjas comerciales; y articulación junto con otros entes públicos en la vigilancia y en el control del movimiento de aves, productos y subproductos de aves.