Información General

Humildad Vs. Soberbia

En el mundo que nos toca vivir parece que ser humilde es un síntoma de debilidad. Sin embargo la Biblia nos revela las bendiciones de la humildad y la tragedia de ser soberbios. La palabra de Dios dice que, El resiste a los soberbios y da mayor gracia a los humildes (Santiago 4:6). Cuando uno mira a Jesús ve que una de sus características sobresalientes fue la humildad. Podemos leer en los evangelios en Mateo 11:29 “Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas”. No sólo dice que es manso y humilde sino que nos anima a imitarlo. Más aún añade que ser humilde traerá descanso y paz a nuestra alma. El sabio Salomón escribe en Proverbios 16:18 Antes del quebrantamiento es la soberbia,  y antes de la caída la altivez de espíritu. Es una dura advertencia, dice que antes de ser quebrantado o caer avergonzado, viene la soberbia y la altivez. Hace unos días pudimos ver una pelea promocionada con bombos y platillos; Sergio “maravilla” Martínez hacia declaraciones sobre la paliza que le daría a su adversario. Desafiante, petulante, soberbio decía muéstrenle una foto a la esposa porque después de la pelea no lo van a conocer. Pero la verdad este puede ser un personaje que hace un hombre para promocionar una pelea o darle una nota de color. Lo que más me preocupó fueron sus declaraciones a la Revista 23, el expreso. En algunas ocasiones, la religión (Dios) es indispensable, pero en mi persona no lo veo necesario. Hay gente que tiene más o menos fortaleza y, aquellos que tengan más debilidad quizá necesiten aferrarse a algo. Pero no creo en un hombre de barba. En eso de que si pecás, pensás mal u obrás mal vas al infierno, pero El te ama. ¡¿Qué cojones es eso?! Si me cruzo con Dios en la calle, le parto la cara. No digamos tonterías, concluyó.  La realidad nos cuenta que la madrugada del 8 de junio hizo una pelea desastrosa, perdió por paliza, su técnico lo retiró en el comienzo del décimo raund para que no lo sigan golpeando, y como si fuera una ironía del destino, Miguel Cotto lo derribó 3 veces con su brazo derecho. Como dice el texto, primero fue la altivez, la soberbia y luego la caída. Si somos algo es porque Dios nos dio la vida, la capacidad y la bendición de obtenerlo. No perdamos la humildad, la dependencia y el respeto a Dios. La Biblia expresa en la carta de Pablo a los filipenses en el capítulo 2, versículos 5 al 9- Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús, el cual, siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse, sino que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres; y estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz. Por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre… Cuando Dios es el que exalta, el que reconoce, podemos gozar de los objetivos y logros obtenidos. La soberbia y la auto exaltación sólo traen dolores. Aprendamos de Jesús, El fue manso y humilde de corazón. Dios le bendiga.

Autor: REDACCION

Estás navegando la versión AMP

Leé la nota completa en la web