Erick Rolando, directivo de la Confederación Granjera del Uruguay (CGU), afirmó que las heladas en el campo ya están complicando las producciones de frutas y hortalizas, sobre todo, en el norte del país, lo que podría tener efectos en los precios finales.

"Tenemos una helada bastante importante y se complica trabajar, en especial, con la poda y el trabajo de los operarios", expresó Rolando en diálogo con Radio Carve 850 y luego sumó: "Por suerte, se avanzó mucho en cultivos protegidos que minimizan los cambios climáticos, a tal punto que en el sur se está produciendo tomates que antiguamente eran impensables de cultivar en estas zonas".

El directivo explicó que algunos cultivos resisten mejor, pero otros ya muestran atrasos. "Todo lo que es cebolla, zanahoria se ve atrasado, por lo tanto, si siguen estas temperaturas de ahora y no se llega al umbral constante de 15°C se van a retrasar para la posterior cosecha", insistió.

Advirtió que incluso las estructuras de invernaderos pueden sufrir daños si se mantiene la ola de frío. "Es más difícil que se produzca algo extremo, pero si la temperatura baja de los -3°C se van a dañar los cultivos ( como tomates, lechuga o frutilla) y el productor tendrá que aplicar tecnología como aspersores de agua que mantengan la temperatura ambiental no tan baja para que no se quemen los cultivos. Pero muchas veces se ha dado que se congelan las mangueras que llevan el agua y dejan al productor sin poder hacer nada, y eso puede ocurrir, sobre todo, en el norte si continúan los días fríos como los de ahora", aseguró Rolando.

LOS CULTIVOS MAS COMPLICADOS

PARA MANTENER EN LAS HELADAS

Al hablar de consecuencias concretas, anticipó que, si el clima no mejora, habrá consecuencias en los precios. "Se puede ver afectado el precio en los rubros de hojas (lechuga, acelga), pero en la cebolla no hay una situación crítica, aunque puede haber un faltante que se puede solucionar con la importación, que en definitiva afectará al bolsillo del productor y el consumidor final", sentenció.

Rolando también planteó reclamos al gobierno. "Estamos dialogando con el gobierno para que el subsidio al agua sea en todo el año y no solo en el verano, ya que ahora se utiliza para prevenir las heladas con riego artificial".

El dirigente rural alertó por el bajo nivel de las reservas hídricas: "Hoy estamos preocupados por las aguas subterráneas que están 3 metros por debajo del nivel normal, porque si viene un verano seco vamos a tener problemas de abastecimiento de agua. Hay que hacer grandes obras pluviales para riego y abastecimiento de la población, porque si no vamos a tener varios años de sequía".

Por otro lado, recordó que este tipo de fenómenos meteorológicos tienen un efecto directo sobre la economía del país. "Las frutas y hortalizas inciden hasta en un 5% en el IPC, por lo tanto, si hay variable de precios en manzana, papa, tomate, cebolla... bueno, van a impactar en el número general de la inflación y nadie quiere que suceda esto. Hay que prevenir con inversiones para que los productores accedan a tarifas razonables en cuanto a sus insumos para que eso sea trasladado al consumidor final", concluyó.

PRODUCTORES SANTAFESINOS EN ALERTA

Al mismo tiempo, y debido a las bajas temperaturas, los productores santafesinos se encuentran en alerta por la producción de verduras y cómo podría impactar en los precios del mercado. En tal sentido, aseguran que esta semana y la próxima son clave para la producción de la hoja en la zona.

En este sentido, Carlos Otrino, presidente del Mercado de Productores y Abastecedores de Frutas, Verduras y Hortalizas de Santa Fe, explicó en LT 10 que la última semana ya afectó la producción hortícola de la zona y se verá una merma "en los próximos días".

En tanto, indicó que "en general los valores de los productos del mercado están dentro de la racionalidad y algunos de ellos con tendencia a valores bajos desde hace días. Ninguna está sobre la media. Son precios accesibles".

En este marco, expresó: "esperamos que el impacto de las temperaturas en nuestra región no tenga un nivel de daño que perjudique la calidad de la verdura que al día de hoy mantiene precios razonables y hay abastecimiento", y agregó "de cualquier manera hay que esperar diez o doce días para ver cómo evoluciona todo el sistema".