Sociales

León XIV: La esperanza no significa tener todas las respuestas, sino confiar en Dios

Audiencia del Papa con peregrinos de Letonia.
Crédito: Vatican Media

Por Almudena Martínez-Bordiú

CIUDAD DEL VATICANO, 24 (AIC PRENSA).- El Papa León XIV afirmó que la esperanza “no significa tener todas las respuestas, sino que nos llama a confiar en Dios”.

El Pontífice se expresó así durante la audiencia concedida este lunes en el Vaticano a fieles procedentes de Letonia, quienes viajaron a la Ciudad Eterna para conmemorar el centenario de la primera peregrinación oficial letona a Roma.

Tras dirigir un saludo a la primer ministro, Evika Siliņa, con quien se reunió en privado previamente, el Santo Padre agradeció a los peregrinos mantener viva la tradición y seguir los pasos “de sus antepasados en la fe”.

Así, recordó que Roma “siempre ha sido un hogar para todos los cristianos, porque es aquí donde los grandes apóstoles Pedro y Pablo dieron el testimonio supremo del Evangelio al convertirse en mártires de la fe”.

El Pontífice también recordó la visita que el Papa Francisco hizo al país en 2018, en el marco del centenario de la independencia de la nación, donde habló “de las dificultades que su país experimentó en el pasado”.

“Si bien el conflicto actual —continuó el Papa— en su región puede evocar recuerdos de aquellos tiempos turbulentos, es importante que todos nos volvamos a Dios y nos dejemos fortalecer por su gracia cuando nos enfrentamos a tal tribulación”.

Al evocar las palabras del papa argentino, León XIV subrayó “el papel vital que la fe cristiana desempeñó en la historia de su país”. En este contexto, agradeció la unión entre Letonia y la Santa Sede cuyas relaciones se han estrechado en los últimos años.

El Santo Padre también afirmó que es necesario unir la esperanza “a la virtud de la fe para mantener la mirada en el presente y ver las muchas maneras en que Dios nos está bendiciendo aquí y ahora”.

En este sentido, explicó que una peregrinación “tiene un papel importante en nuestra vida de fe, ya que nos da el tiempo y el espacio para encontrarnos con Dios más profundamente”.

“Nos aleja de la rutina —agregó— y del ruido de la vida cotidiana y ofrece el espacio y el silencio para escuchar la voz de Dios con mayor claridad”.

Finalmente, animó a transmitir lo vivido en Roma cuando regresen a sus hogares, ya que —afirmó— “una peregrinación no termina, sino que sus semillas deben arraigar en su discipulado diario y dar fruto en sus vidas”.

Autor: 478892|

Estás navegando la versión AMP

Leé la nota completa en la web