El 27 de septiembre de 2012 realicé una nota sobre Siria, todo un tiempo ha transcurrido y la ansiada paz, no llega y cada día está más lejos. Para el común de los mortales, lo que pasa en Siria ha de ser una cuestión casi de otro planeta, pero este hecho internacional, como muchos otros siempre tendrá trascendencia para todos.
Washington, Paris y Londres mantienen posiciones contradictorias, mientras se juntan para encontrar una solución política al conflicto, respaldan a la vez a los terroristas vinculados al Frente Al – Nusra, que prosigue sus crímenes contra el pueblo sirio, para prolongar la crisis. Estas potencias determinaron hacer uso de sus fuerzas contra Siria, si estos no ponen fin a los depósitos de armas químicas.
Desde Damasco, oportunamente se dijo: “La legitimidad política y constitucional en Siria, es derecho exclusivo de su pueblo y no estará permitido que EEUU, ni sus acólitos se arroguen el derecho de despojárselo o de de atribuirse el poder y el mandato de imponer su voluntad en ese sentido.” “Bashar al- Assad, es el presidente legítimo elegido por el voto popular y lo seguirá siendo mientras así lo decida el pueblo Sirio”. “Siria , no es Egipto, Bashar al – Assad, no es Mursi, hoy destituido por un golpe de estado militar, apoyado por EEUU, el cual está preso y será juzgado por supuestos crímenes de dudosa aceptación y autoría”. “A quién no le guste esta verdad, no debería asistir a la conferencia de Ginebra para lograr la paz”. “Siria pretende una solución política al conflicto, basado en el dialogo, con sostenimiento de soberanía e integridad territorial y sin ingerencia extranjera que intentan imponer sus voluntades y desestabilizar a la nación”.
El Ex consejero de la seguridad Nacional de la Casa Blanca, el muy conocido Zbigniew Brezezinski, criticó duramente la decisión del Presidente Barack Obama de querer derrocar al presidente Sirio Bashar al- Assad y de apoyar a los terroristas rebeldes. Este dijo: “Los acontecimientos que vive Siria son el resultado de las intervenciones injustificadas de EEUU y los planes de Catar y Arabia Saudí destinados a cambiar algunos gobiernos de la región, sin embargo adoptar tales medidas solo se beneficiará el régimen de Israel”.
“El permanente envío de armas a los rebeldes, no solo hará disminuir la confianza pública en la política de EEUU, sino que además aumentará a nivel mundial las agresiones hacia nuestro país”.
Desde marzo del 2011, Siria ha sido escenarios de disturbios por terroristas financiados desde algunos países de occidente y además por Arabia Saudí, Catar y Turquía, con el objeto de derrocar al gobierno.
El presidente de EEUU, recurre al tan remanido argumento de realizar sus acciones para proteger “la seguridad nacional norteamericana” y justificar así sus agresiones colonialistas.
El futuro de Israel y de los estados títeres arabes es esencial en la agresión contra Siria. La alianza que han conformado Occidente, Israel, las petro-monarquías del golfo y Turquía, saben perfectamente que la victoria de Siria y su presidente desencadenará una ola nacionalista árabe, hostil al movimiento sionista y a las fuerzas coloniales en la región.
Esta victoria favorecerá a Siria, Irán y los movimientos de resistencia.
Lo cierto es que hoy Siria es un país semidestruido y este conflicto geopolítico, ha terminado con las vidas de más de 136.000 ciudadanos.
En Ginebra se están realizando negociaciones de paz, su mediador internacional es Lasdar Brahimi, bajo la supervisión de la Naciones Unidas y bajo la presión de Rusia a favor de Siria y de EEUU que apoya decididamente a la oposición rebelde.
Irán, Ucrania y el norte de Africa esperan su turno y han de ser nuevos y complicados conflictos.