El Juzgado Federal N°1 de Córdoba ordenó a la Universidad Nacional de Córdoba, y a la empresa funeraria Juan Caruso, indemnizar a una familia por el daño moral sufrido tras la confusión y entrega errónea del cuerpo de un familiar fallecido, en el Hospital Nacional de Clínicas.

De acuerdo a lo conocido, en la sentencia se dispuso una reparación económica, posterior a que los familiares debieran velar y cremar a una persona equivocada, y atravesar dos veces el proceso de despedida.

Uno de los damnificados, ante la prensa dijo "para la familia fue un momento doloroso pasar por todo de nuevo dos veces: dos certificados de defunción y dos de cremación, con una diferencia de 20 días. Es muy difícil para cualquiera".

El caso tuvo un punto de partida, cuando la familia que veló y cremó el cuerpo equivocado, demandó a los antes mencionados por el daño moral, ocasionado. (R.A.A.)