RACING Y RIVER animarán un partido de enorme envergadura en la primera instancia de playoffs del Torneo Clausura, en una suerte de segunda parte del choque del morbo que protagonizaron en los cuartos de semifinal de la Copa Argentina, cuando se produjo el reencuentro entre la Academia y el otrora amado devenido en odiado Maximiliano Salas, que pasó a Núñez por la ejecución de la cláusula de rescisión de 8 millones de dólares.
En esa ocasión el Millonario se impuso 1-0 nada menos que con el gol del jugador de la discordia, y de aquel duelo en campo neutral y con público de ambos equipos se pasará a otro en el que el escenario será el del conjunto de Avellaneda, mejor clasificado en la instancia regular del certamen.
Esa ventaja se veía diluida por la sentencia que pesaba sobre Racing, obligado a jugar tres encuentros en su casa sin la asistencia de sus hinchas por el castigo impuesto por Aprevide (Agencia de Prevención de Violencia en el Deporte), debido al recibimiento masivo con bengalas en el compromiso con Flamengo por la semifinal de la Libertadores.
El organismo determinó que hubo "falta de organización para el control y la vigilancia" y que la pena fuera válida para todos los torneos organizados por AFA. La primera fecha ya fue cumplida en ocasión del 1-0 sobre Defensa y Justicia.
Sin embargo, en las últimas horas el presidente Diego Milito mantuvo una reunión clave con Claudio Tapia -mandatario de la AFA- y Guillermo Cimadevilla -titular de la Aprevide-, en la que logró levantar la sanción al estadio y Racing contará con el 100% del aforo permitido para el encuentro frente a River.
Aún resta conocer si podrá haber bombos, trompetas, banderas, tirantes y telones en las tribunas del Cilindro de Avellaneda.