El Centro de Día La Huella estrena hoy su nueva producción teatral, “La Isla”, una comedia protagonizada por jóvenes y adultos que forman parte de la institución. La presentación se realizará en el Espacio Cultural SEOM (Lavalle 1021), con dos funciones, a las 19 y 21 horas, según informó Alejandro Barbero, quien además de estar al frente del proyecto es Licenciado en Psicología y forma parte del equipo de profesionales de la entidad.
La obra, que agotó las entradas para las dos funciones, propone una historia cargada de humor, reflexión y emoción. Su sinopsis describe una isla desierta habitada desde hace cinco años por una sola persona, cuya rutina se ve alterada por la llegada repentina de un grupo de náufragos. Desesperados por encontrar ayuda o un milagro que los devuelva a la civilización, los personajes se enfrentan a situaciones absurdas, hilarantes y profundamente humanas.
El elenco está integrado por Alejandro Hernández, Malvina Figueroa, Sebastián Perren, Hernán Vaira, Marcelo Alassia, Malvina Díaz, Lucila Maidana, Gabriel Araya, Emilia Sánchez, Carina Boide, Franco Santi, Eros Garetto, Leandro Di Carli, Claudio Mercante, Hugo Acuña, Germán Peterlín y Williams Salva.
La dirección artística está a cargo de Alejandro Barbero y Néstor Gómez, con música en vivo interpretada por Edgar Tschieder y el propio Barbero.
UNA HISTORIA DE INCLUSIÓN Y ARTE
El Centro de Día La Huella es una institución rafaelina con una amplia trayectoria en el trabajo con personas jóvenes y adultas con discapacidad intelectual. Desde su creación, ha desarrollado una propuesta integral de acompañamiento, formación y participación social, basada en la inclusión y el reconocimiento de las capacidades individuales.
A lo largo de los años, La Huella se ha destacado por impulsar proyectos artísticos y culturales, especialmente en el ámbito del teatro, la música y las artes plásticas. Estas iniciativas no solo promueven la expresión personal y la creatividad, sino que también fortalecen la autoestima y el sentido de pertenencia de quienes forman parte del centro.
El trabajo conjunto con familias, profesionales, voluntarios y la comunidad ha permitido consolidar un espacio donde el arte se convierte en herramienta de encuentro y transformación. En ese marco, “La Isla” representa una nueva oportunidad para compartir con el público el talento, la alegría y el compromiso de este grupo de artistas que, desde el escenario, celebran la diversidad y la inclusión.