La Santa Sede informó que “este miércoles 23 de abril de 2025, a las 9.00 horas, el féretro que contiene el difunto Romano Pontífice Francisco será trasladado desde la capilla de la Domus Sanctæ Marthæ a la Basílica Papal de San Pedro, según lo previsto por el Ordo Exsequiarum Romani Pontificis (nn. 41-65)”.
Asimismo, la Oficina de Prensa señala que, “después del momento de oración, presidido por el cardenal Kevin Joseph Farrell, Camarlengo de la Santa Iglesia Romana, comenzará el traslado del féretro. La procesión pasará por la Plaza Santa Marta y la Plaza de los Protomártires Romanos; desde el Arco de las Campanas se subirá a la Plaza de San Pedro y se entrará en la Basílica Vaticana por la puerta central”.
Finalmente, en el comunicado difundido esta mañana por la Oficina de Prensa se indica que, “en el Altar de la Confesión, el Cardenal Camarlengo presidirá la Liturgia de la Palabra, al final de la cual comenzarán las visitas al féretro del Romano Pontífice”.
En la Basílica de San Pedro, el cuerpo del papa permanecerá en un ataúd sencillo -como era su voluntad- abierto durante el velorio para enfatizar en su rol como pastor de la Iglesia Católica y no como jefe de Estado.
Anteriormente, se solía colocar el cuerpo sobre una plataforma elevada, llamada catafalco papal. Pero esa tradición terminó con el funeral con el papa Benedicto XVI en 2022, ya que los deseos de Francisco distan de las elaboradas costumbres del Vaticano.
Benedicto XVI también fue el último Pontífice en ser enterrado en los tres tradicionales ataúdes de ciprés, plomo y olmo. Dos de ellos contenían documentos sobre su pontificado, mientras que el otro llevaba dentro las tradicionales tres bolsas de monedas (de oro, plata y cobre).
El féretro del papa permanecerá expuesto desde este miércoles hasta el viernes 25 de abril a las 19:00 (hora local). Durante los dos primeros días, la Basílica de San Pedro permanecerá abierta hasta la medianoche, tal como ha informado la Santa Sede.
En detalle, los horarios para que los miles de fieles católicos puedan visitar al Pontífice serán los siguientes: el miércoles 23 de abril, desde las 11:00 hasta la medianoche; el jueves, desde las 7:00 hasta las 00:00; y, finalmente, el viernes, la velación se realizará hasta las 19:00. Todos los horarios corresponden a la hora local.
El funeral
Tras la velación pública, el sábado 26 de abril a las 10:00 (hora local) tendrá lugar el funeral del papa argentino. Para ello se le colocará un paño blanco sobre su rostro mientras yace en el ataúd, algo habitual en los funerales papales.
Luego, la eucaristía funeral se celebrará en la Basílica de San Pedro, a la vez que, probablemente, habrá una multitud reunida en la explanada siguiendo la despedida del Pontífice. Al mismo tiempo, la homilía de la misa reflexionará sobre la vida y la espiritualidad del difunto líder católico.
Francisco fue quien presidió el funeral de su predecesor emérito, el papa Benedicto. Y este último, a su vez, fue quien predicó durante los actos fúnebres de su antecesor, el papa San Juan Pablo II, cuando aún no era Benedicto sino el cardenal Joseph Ratzinger; en aquel entonces ejercía el cargo de líder de todos los altos mandos de la iglesia, lo que se conoce como Colegio Cardenalicio.
En la actualidad, quien ocupa ese rol es el cardenal Giovanni Batrista, de 91 años, y aún no está claro si podrá dar continuidad a esta tradición por su avanzada edad. Después de esta eucaristía, se seguirán oficiando misas durante nueve días en memoria de Francisco, un periodo llamado “novendialis”.
Este ritual se inspiró en una antigua tradición romana que prescribía un periodo de luto que terminaba al noveno día después del fallecimiento.
El entierro
En tiempos pasados, los papas eran enterrados en distintos lugares. Pero con la legalización del cristianismo en el Imperio Romano a inicios del siglo IV, los Pontífices pasaron a ser enterrados en las catacumbas, los cementerios a las afueras de Roma, la capital italiana.
Años después, esto cambió y los papas podían ser enterrados en lugares como la Basílica de San Juan de Letrán (la catedral oficial de Roma) u otras iglesias en sus alrededores.
En su mayoría, todos los líderes difuntos de la Iglesia Católica están enterrados en las grutas bajo la Basílica de San Pedro. Sin embargo, desde el entierro del papa León XIII en San Juan de Letrán en 1903, todos los papas han sido enterrados allí.
Ahora, según los deseos de Francisco, es probable que se realice una procesión por la capital italiana hasta Santa María la Mayor, incluyendo el coche fúnebre y los vehículos que transportarán a otros asistentes al ritual privado.
Finalmente, tras unas últimas oraciones y la aspersión de agua bendita, el ataúd será colocado en un lugar definitivo dentro de la iglesia.