Preocupa severamente el aumento de casos de sífilis en 2025. Según el último Boletín Epidemiológico Nacional, hay un incremento sin precedentes de contagios de esta enfermedad de transmisión sexual, con cifras que superaron los máximos históricos. En 2024 se notificaron 36.917 diagnósticos y la tendencia se mantiene en alza.
El registro indica que, en 2025, el incremento fue del 20,5% en todo el país, con 36.702 casos notificados y un impacto marcado en jóvenes de 15 a 39 años. Las provincias más afectadas fueron Neuquén, Entre Ríos y Tierra del Fuego, mientras que el Ministerio de Salud se vio obligado a reforzar su sistema de vigilancia epidemiológica, el diagnóstico temprano y la distribución de insumos esenciales para contener el avance de la enfermedad.
En la provincia de Santa Fe, se registraron 4.229 casos de sífilis en las últimas 44 semanas del año. En comparación al BEN anterior, significa un retroceso del 2% de los casos (se reportaron 4.285 en el periodo anterior), lo que marca un leve descenso de esta infección en la provincia, a contracorriente de los datos a nivel nacional. No obstante, la cantidad de contagios reportados sigue encendiendo alarmas.
El informe también indica que la mayor carga de enfermedad se concentró en personas de entre 15 y 39 años, que representaron el 76% del total. Las tasas más elevadas del período se registraron en los grupos de 20 a 24 años y de 25 a 29 años. En segundo lugar, el grupo de 30 a 34 años también presentó una carga elevada, con una tasa general de 146,7 por cada 100.000 habitantes, seguido por el grupo de 15 a 19 años, con una tasa de 108,2 por cada 100.000. A partir de los 35 años se observa una disminución progresiva tanto en casos como en tasas, un patrón más marcado en mujeres.
Por este motivo, el Ministerio de Salud señaló que el incremento de casos en Argentina se inscribe en un contexto de aumento global y regional, con mayor intensidad en poblaciones jóvenes y en mujeres en edad fértil.
Cabe destacar que, si no se trata adecuadamente en su primera fase, cuando apenas hay algunas erupciones en la zona genital, la etapa secundaria puede incluir una erupción cutánea, fiebre, fatiga, dolor de garganta, ganglios linfáticos inflamados y caída del cabello. En una etapa tardía, los síntomas pueden ser graves y afectar órganos como el cerebro y el corazón, según informó la Organización Mundial de la Salud.