El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) pronosticó que el trimestre mayo-junio-julio de este año podría desarrollarse con semanas de temperaturas por encima de lo habitual en gran parte del territorio santafesino, mientras que la probabilidad de lluvias sería la normal para esta época del año. En su informe, el organismo también brindó detalles sobre las condiciones esperadas en todas las provincias.
Cabe destacar que Abril presentó condiciones bastante cercanas a los promedios históricos, húmedo y cálido. Ahora, en el mes de mayo, se abre una nueva etapa en la evolución climática del otoño. Por lo pronto, continuará la neutralidad en un alto porcentaje entre El Niño y La Niña.
En cuanto a la proyección de precipitaciones, el pronóstico es dispar en todo el país. Mientras que en la mayor parte de la Patagonia y también en parte de Cuyo podrían registrarse lluvias normales o inferiores a lo habitual para esta época del año, en el noroeste se espera una estación seca, en tanto que más hacia el noreste podría darse el escenario contrario, con precipitaciones por encima de lo normal.
Para el caso de Santa Fe y el resto de la región Pampeana y del Litoral lo más probable según el SMN es que las lluvias se ubiquen en niveles normales. Pero lo más relevante se desprende de las previsiones de temperatura, que sobre toda la franja este de la provincia podrían ser superiores a lo normal durante el trimestre, mientras que en el resto de la provincia se esperan registros térmicos normales para la época.
En cuanto a las temperaturas, mayo se perfila como un mes algo más cálido de lo normal en la mayor parte de Argentina. Si bien se esperan ingresos de aire frío, típicos de la época, el promedio de temperaturas mensuales se ubicaría por encima de los valores históricos, tanto en la franja central como en el norte argentino.
Este comportamiento térmico implica que, aunque no se descartan pulsos de frío significativos ni eventos de heladas, especialmente sobre la región pampeana y Cuyo, su frecuencia sería inferior a la habitual para esta época del año. Esto resulta un dato clave para los productores agropecuarios que planifican las actividades sensibles a las bajas temperaturas.
Durante las últimas horas el SMN también difundió un gráfico comparativo basado en las anomalías de temperaturas mínimas medias a nivel país para los meses del otoño, con datos del periodo que va de 1961 a 2024. Allí puede observarse que, en la mayoría de los últimos años, ese desvío se ubicó por encima de lo normal. Los años en que la anomalía fue más marcada fueron 2024 (1 grado) y 2015 (1,3 grado). Mientras que en el sentido contrario, con marcas inferiores a lo normal, la mayor diferencia se dio en 2023 (-1,4 grado).
Lo cierto es que a partir de 2010 se observa una tendencia a que los otoños sean en general más cálidos que el promedio histórico, cuando antes de ese año predominaba una tendencia opuesta, con predominancia de anomalías más frías.