Saltar menú de navegación Teclas de acceso rápido
Notas de Opinión Domingo 17 de Julio de 2011

Como las perlas de un collar...

Leer mas ...

Roberto Actis

Por Roberto Actis




Aunque estemos bastante habituados a la clase de episodios de fuerte repercusión pública, es difícil encontrar otra semana parecida a la concluída ayer. Fue una verdadera catarata de hechos y acciones que, dada la rapidez con la cual se sucedieron, prácticamente no dejaron margen para las referencias de análisis, apenas la mención informativa, al menos en algunos de ellos. Otros en cambio sobresalieron por trascender con  sus proyecciones al futuro.

Caso preciso, e inicio de la serie que siguió posteriormente, el revés electoral sufrido por el kirchnerismo en la ciudad de Buenos Aires. Nada novedoso es cierto, pues -salvo una vez Erman González en plena efervescencia menemista, el peronismo nunca hizo pie en ese territorio- el triunfo del macrismo lo daban todas las encuestas, pero ninguna por esos casi 20 puntos que finalmente fue la separación del kirchnerismo, y que en realidad hacen bastante inútil el balotaje del último domingo del mes. Más que otra cosa, parece enviar poco menos que a la incineración a alguien como Filmus, que incluso sus rivales califican de valioso, de manera especial después de los exabruptos de algunas voces kirchneristas que salieron a darle muy duro a los porteños. Y si bien, con  cierta benevolencia hasta podría dejarse de lado el "asco" del impresentable Fito Páez, pues es solo un adherente, en cambio Aníbal Fernández es nada menos que el jefe de gabinete, y Horacio González el titular de la Biblioteca Nacional. Otra vez vuelven a aparecer en este sector los que son más papistas que el Papa, pues en la carrera obsecuente por tratar de quedar bien con la presidenta Cristina -que tiene absolutamente todo en su puño- caen en esta clase de reflexiones que no hacen otra cosa que cargarle una verdadera mochila de piedras. En este caso a Filmus. ¿Cómo intentar remontar con esta clase de contrapesos? 

Mientras tanto no termina de diluirse -como se intenta- el caso de los Schoklender, ahora con protesta de trabajadores cortando calles porque la Fundación Madres de Plaza de Mayo les adeuda salarios, además del pago de cargas sociales -patética la imagen de Hebe Bonafini respondiendo a un obrero que le vaya a reclamar a Schoklender-, conociéndose también el ocultamiento que se hizo en la Unidad de Información Financiera, que dirige José Sbatella, cuando hace más de un año la diputada Quiróz denunció todas estas irregularidades. ¿Alguna vez habrá algún responsable de algo que sea sancionado? De cualquier manera, como van las cosas con esta colosal corrupción de los Schoklender y compañía que incluye también a la propia hija de Bonafini -a quien le están apareciendo propiedades de casi todos los colores- es poco probable que se logre hacerlo acallar tan rápidamente. 

Tal vez la pregunta que se hacen muchos argentinos es ¿por qué un ente como Madres de Plaza de Mayo es financiada para construir viviendas? Pueden existir muchísimas respuestas, usted puede elegir la suya.

Si pasamos por los resultados del ADN de los hijos de la directora de Clarín, que dieron negativo en cuanto a las familias querellantes, vamos apilando otro revés de considerables repercusiones, de parecido calibre al conocimiento que el conductor de la UOCRA Gerardo Martínez fue integrante de los servicios de inteligencia de la dictadura. Justo el hombre que parecía estar bendecido para suceder una vez que se diera el golpe de gracia a Moyano en la CGT. La verdad, que hoy en día no se puede confiar en nadie, mucho menos en toda esta pléyade que viene sosteniéndose en el poder, sea quien sea el que esté en el gobierno.  Eso al fin de cuentas, es lo de menos.

Pero si faltaba algo para rebasar el vaso fue el nuevo desmadre de Moreno, esta vez prohibiendo a los quioscos del Mercado Central la venta de algunas publicaciones del grupo Clarín.  Una muestra más de la intolerancia en su más genuina esencia.

En tanto, mientras todo esto se iba desencadenando, el faltante de gas y combustibles seguía causando problemas, a los que parece tendremos que irnos acostumbrando al menos hasta septiembre. Como buscando contrabalancear, se anunció el "cerdo y lácteos para todos", que después de las anteriores experiencias con otros rubros, es complicado comprender que se siga adelante con esta clase de iniciativas, que más que jugar a favor terminan jugando en contra.

También existe cierta preocupación por la economía, porque todos los índices andan bien, pero la balanza comercial tiene un evidente tembleque. Es que los granos -el maldito yuyo- y manufacturas del sector dejaron 33.000 millones de dólares, mientras que los automóviles que se fabrican en niveles récord, arrojaron un déficit comercial de 25.000 millones de la divisa estadounidense. De paso, como para no temblar si hay posibilidad que Estados Unidos pueda entrar en default. ¡Chau dólar,  derrumbe total!

Mejor dejarlo ahí y disfrutar del domingo.

Seguí a Diario La Opinión de Rafaela en google newa

Los comentarios de este artículo se encuentran deshabilitados.

Te puede interesar

Teclas de acceso