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Notas de Opinión Martes 4 de Abril de 2017

La brecha en las calles

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Bryan J. Mayer

Por Bryan J. Mayer

El pasado 24 de marzo, aniversario número 35 del golpe de Estado que puso en marcha la dictadura, fue la última oportunidad hasta la fecha que

la oposición utilizó para marcarle el ritmo al gobierno, pero una

semana después, y por primera vez, los vecinos que avalan la actual

gestión se tomaron revancha bajo una bandera que englobó todos los

pedidos individuales: “democracia”.

Crónica de la brecha que

ahora se disputa en las calles.

Los análisis

políticos indicaban, hasta el último día de marzo, que la gestión

del presidente Macri caía en picada junto con su imagen: que el

nuevo aumento de tarifas, más causas judiciales en contra de su

gente, las idas y vueltas en la toma de decisiones eran los puntos

críticos del gobierno de Cambiemos; sumados a la continua presión

de la oposición encabezada por los sectores más duros del

kirchnerismo. Un sector residual de la gestión anterior, comandados

por Cristina Fernández y supervisados por Parrilli, Bonafini y

Recalde, cuyo único objetivo es retomar el poder. Eso hasta marzo

porque el primer día de abril le dio a Cambiemos esa “luz al final

del túnel” de la que habló la vicepresidenta Michetti un

tiempo atrás: contra todo pronóstico miles de personas tomaron las

calles de Capital Federal y las principales ciudades del interior

para manifestar su apoyo al Presidente y el respeto a la Democracia.

Esto le da un suspiro a Cambiemos y genera miedo en el resto de los

partidos no oficialistas.

La famosa

“brecha” electoral de nuestro país quedó remarcada con Macri presidente, pese a que había prometido trabajar en sentido

contrario. En ella quedó el kirchnerismo y su táctica de plena

ofensiva al gobierno en cada decisión. Una oposición alineada con

los gremios, en su mayoría liderados por caciques que responden a

Cristina, que se encargó -tomando el arma histórica del justicialismo- de hacer notar su descontento causando caos en las

calles de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires cualquier día y en

cualquier horario, generalmente en los picos de tránsito cuando los

transeúntes se disponen a salir o regresar de sus trabajos.


Molestia, enojo, odio e histeria es lo que se busca generar desde el

kirchnerismo con el único fin de lograr el “esto no va más” con

Macri en el Ejecutivo. Así quedó claro en las últimas

manifestaciones, con “el helicóptero” como símbolo de lucha.

“Que se vaya” piden, mientras atribuyen a los actuales

funcionarios la responsabilidad de la pobreza, la defensa de los

sectores ricos, la protección a las empresas donde varios alfiles

del Presidente fueron CEO, la poca valorización al sector público y

la obsecuencia a los principales focos económicos. “Macri, basura,

vos sos la dictadura” recitan a coro en cada oportunidad que pueden

y la respuesta llegó, un día, del otro lado con un pedido

antagónico de este enunciado: “democracia”.

No solamente se

ve una oposición de ideas respecto a las políticas del gobierno

entre las partes, sino también una abismal diferencia en las formas

que el sector afín al macrismo se encargó de poner en relieve este

1 de abril. Los “autoconvocados” a defender la democracia y pedir

la continuidad de la actual gestión hasta las próximas elecciones

eligieron un sábado para marchar, sin cortar ninguna vía de

circulación -pese al bajo caudal de tráfico-, no se escucharon

insultos, no pintaron ninguna calle o pared ni mucho menos un

monumento histórico, no se enfrentaron a la policía y tampoco

terminaron a las trompadas. Todo este clima se vivía en medio de

miles de manifestantes que caminaban, en Capital, desde el Obelisco y

las avenidas circundantes hacia Plaza de Mayo frente a la Casa Rosada

para cerrar el encuentro entonando el Himno Nacional Argentino.

“Vinimos con la SUBE” cantaban, haciendo referencia a los

colectivos que casi a diario son rentados para movilizar militantes k

a las distintas movilizaciones. Y fueron para pedir “democracia”,

a una semana de una manifestación dividida como la del 24 de marzo

donde muchos dejaron manifiesto apoyo a un sistema como el comunista

(véase en nuestra región a Venezuela o Cuba como ejemplos) y

también sus deseos de que Macri renuncie. Lo contrario hicieron los

del 1ª al son de “Presidente, el pueblo está presente”: eligen

la democracia y quieren que la actual gestión termine en tiempo y

forma su mandato.

Como se manifestó

algunas líneas atrás, sorprendió la diferencia abismal en las

formas: los miles de vecinos llegaron a Plaza de Mayo sin cortar por

completo las vías de tránsito, dejando pasar los vehículos en las

esquinas mientras avanzaban hacia el punto de encuentro, los cánticos

no eran insultantes y las únicas banderas que se levantaron fueron

las de Argentina. Pero si algo era para emocionarse sin dudas fue

todas esas familias frente a la Casa Rosada, con sus carteles de

Democracia cantando el Himno. Cosa que nunca logré ver en los tantos

cortes o manifestaciones que cubro en la Capital Federal. Tampoco se

dejaron las calles inundadas de mugre ni mucho menos se rompió la

Catedral o el Cabildo. Características que se repitieron en cada uno

de los actos que se realizaron en los centros neurálgicos del

interior como Rosario o Córdoba. Esos miles de manifestantes tampoco

faltaron a sus trabajos sino que eligieron perder parte de su tiempo

libre para salir a las calles.

La brecha está candente frente a un año electoral. Año que hasta

ahora vaticinaba una derrota abismal de Cambiemos en las elecciones

de medio término que se darán en pocos meses, pero que a raíz de

esta masiva marcha de apoyo -subestimada por muchos en sus horas

previas- logró torcer para dejar que Macri vuelva a esperanzarse

con tener una buena performance con sus candidatos en la mayoría de

los distritos. El correr del tiempo, las medidas económicas del

gobierno y la estrategia que adopte el kirchnerismo en respuesta a

este duro e inesperado golpe popular determinarán lo que sucederá

en el Congreso de la Nación y algunos municipios a partir de finales

de este año. 

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