La tragedia se hizo presente en la provincia de Neuquén, al constatarse que un menor de dos años de edad, dejó de existir al comer un caramelo.
El deceso se produjo por una obstrucción en las vías respiratorias, en la localidad de Loncopué.
El pequeño fue identificado como Thiago Ismael Jara, quien fue ingresado a un hospital local, y luego derivado a otro centro de salud de Zapala, para una atención más especializada.
Lamentablemente, nada se pudo hacer para salvarle la vida.
Comentarios