Respondía al nombre de Leandro Javier Serrano Díaz, y tenía dos años de edad, el niño que en la santiagueña población de Lilo Viejo, cayó a un canal y falleció por ahogamiento.
La víctima residía junto a su familia en una vivienda cercana al canal, y en un determinado momento se alejó de la vista de sus progenirtores por unos minutos, y lamentablemente poco después se conoció el trágico suceso.
Policialmente se investiga al respecto, a los fines determinados por la ley.
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