Por Rubén A. Armando
Personal de la Comisaría 4ª de María Juana, mediante un llamado telefónico en boca de un vecino residente en el barrio San Francisco, se informó sobre que se habían escuchado detonaciones de arma de fuego, y movimientos de vehículos ajenos al domicilio identificado.
Se trató de un inmueble sito en la esquina de las calles Entre Ríos y Sargento Cabral, donde a un costado de la finca se visualizó a una persona que gritaba que habían ingresado al garaje -que lleva a un quincho y dos habitaciones con baño exterior- tres sujetos desconocidos, dos de ellos armados con pistolas, estando encapuchados por lo cual sus rostros no eran visibles.
Así las cosas, de acuerdo al exponente tomaron por el cuello a un joven de 25 años, que estaba con un hermano de 23 años de edad y un amigo de 20 años, y amenazaron con dispararle a la cabeza.
Lo citado precedentemente, ocurrió en un contexto en el que los intrusos gritaron que si no entregaban el dinero que portaban y la marihuana, uno de ellos terminaría muerto.
Fue entonces que se escucharon tres detonaciones, dos proyectiles impactaron en el tórax de Agustín S., en tanto otro fue ejecutado en el cráneo, huyendo finalmente los delincuentes del lugar, llevándose solamente una riñonera.
En una ambulancia el herido fue trasladado al hospital de Rafaela, donde se determinó que exhibía un orificio de entrada y salida de proyectil, y dos disparos en la cabeza, alojándose en la base craneal, presentando riesgo de vida.
Al respecto, se recogieron dos vainas servidas y un proyectil intacto, en un sector del patio de la casa.
Por otra parte, efectivos de la Policía de Investigaciones (Operativa), en una requisa secuestraron teléfonos celulares, la suma de 1.600.000 pesos en efectivo, un par de balanzas de precisión, cuatro librillos de papel seda, una pica de plástico, , 96 "porros" (cigarrillos de fabricación casera), 266 gramos de picadura de marihuana, dos plantas de marihuana, una caja con recortes de nylon, una tijera, un cuchillo, una una cuchara, una lapicera, otros 298 gramos, y 4 kilos de lo que se conoce como "cogoyos".
Finalmente, Gastón S. fue detenido en el marco investigativo de lo sucedido.