Por REDACCION
A una semana de haber sido reelecta como presidente de la Sociedad Rural de Rafaela, Norma Bessone compartió una editorial contundente que resume lo que dejó el año desde el punto de vista institucional y también gremial.
“Durante la Asamblea, ha sido una enorme satisfacción ver reflejado todo el trabajo del último período y recorrer el camino de lo acontecido resultó movilizante: el impacto de las restricciones sanitarias en todos los ámbitos, las consecuencias devastadoras de la pandemia, las pérdidas humanas que aún lloramos y las terribles heridas socioeconómicas que no se han podido subsanar”.
Con respecto al ámbito productivo, Bessone reconoció sin vueltas que el sector “ha sido castigado desde varios frentes”. En ese sentido, enumeró: “prohibiciones sin fundamento, cepos, intempestivos cambios de rumbo en las decisiones políticas, continua falta de previsibilidad y, lo más grave, la campaña de estigmatización del sector, mezclada con violencias y presiones”. Por eso, reconoció cierta “tristeza y preocupación” teniendo en cuenta que el “deterioro de los vínculos que se forjan en las sociedades, empobrece la mirada, aleja, distorsiona, destruye y no brinda alternativas reales de superación para nadie”.
Por último, indicó: “estamos convencidos que es la vía es otra, la de dialogar en el sentido colaborativo y buscar siempre nuevas alternativas que respondan a las exigencias del contexto. Así seguiremos en estos nuevos dos años de gestión que quedan por delante”.
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