Por REDACCION
Los propietarios de campos situados en jurisdicciones de las comunas que se enmarcan dentro del Comité de Cuenca del arroyo Las Calaveras – Las Penquitas arrancaron el año con sorpresas. La primera fue cuando recibieron las boletas para el pago de la tasa correspondiente al mes de enero, cuyos montos registraron un aumento del 50% respecto del último período de 2014.
El incremento significativo no fue argumentado oportunamente, lo que motivó diversos reclamos de productores y propietarios y que obligó a una revisión por parte de la administración.
Posteriormente, esta semana para ser más concretos, los contribuyentes recibieron una nota indicando que quedaba sin efecto el aumento del 50% y aduciendo que la impresión de dichos importes obedeció a un error en el sistema informático. Incluso se comunicó que aquellos propietarios que realizaron el pago de dichas boletas, la diferencia a su favor será deducida del impuesto a abonar por el período de febrero.
Una aclaración a tiempo, que sirvió para evitar un disconformismo mayúsculo en virtud de algunas soluciones que tardan en llegar.
RECLAMO POR OBRAS
Y COORDINACION
Los contribuyentes del Comité de Cuenca de Las Calaveras – Las Penquitas insisten al gobierno de la provincia con peticiones de mejoras en la articulación de la misma. El receptor de los pedidos es el Ing. Alberto Mitri, director de Drenajes y Retenciones de Santa Fe.
Desde hace poco más de un año y medio se reclama la inclusión de todos los distritos al Comité, de manera que cada obra pueda abarcar toda la zona de la cuenta. Se hace hincapié en el régimen de dragado, en la búsqueda de que los canales sigan los bajos naturales, que llega a determinado nivel pero no continúa en el distrito limítrofe, por lo que el agua rebota y se mantiene en campos de propietarios que sí están dentro del Comité, generando innumerables perjuicios a quienes pagan la tasa por estos servicios.
En varias oportunidades se solicitó que se incluyan aquellas comunas que no participan del convenio ya que es casi imposible pensar en soluciones generales si no se articulan los diferentes tramos de la cuenca a través de las obras. Por ello se pide a la Dirección gubernamental que regule y reglamente la unificación de los criterios, de manera que las soluciones puedan ser sustentables.
Las necesidades tienen que ver con un plan estratégico para evitar lo que hoy está ocurriendo, con un ordenamiento hídrico global más el control del manejo económico.
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