El ciclo de Marcelo Varela como técnico en 9 de Julio arrancó de buena manera el domingo pasado en Lincoln, sumando un punto como visitante frente a El Linqueño. Como inicio un resultado auspicioso, pero que debe ratificarlo en el Germán Soltermam, el domingo a las 16 cuando reciba en el clásico a Ben Hur con el arbitraje del santafesino Maximiliano Manduca.
Las cuatro derrotas anteriores consumieron la etapa de dos años y medio de Maximiliano Barbero y ahora ya es una etapa nueva.Varela, que esta semana completó su cuerpo técnico con Diego López (que viene de Tiro Federal de Felicia) como ayudante de campo y el preparador físico Gian Rogiani (también está dando una mano el Profe Diego Burkhard), es consciente de lo delicado del momento.
El domingo se cerrará la primera rueda y por ahora el León tiene solo cinco puntos, uno más que El Linqueño. Pero pensando un poco más hacia adelante, los tres últimos de la Zona 4 tienen 7 puntos (Boca Unidos, Sarmiento y Crucero del Norte, jugando un partido menos). Esto ya que los equipos de la Zona 4 que no terminen entre los cinco primeros, irán a la Reválida con los cuatro que no clasifiquen de la parte Norte.
Pero naturalmente que Varela confía en el material que cuenta para sacar al equipo adelante, y en su primer encuentro ya dio muestras. Es cierto, fue como visitante y ahora la obligación es otra.
Lo del rival en el contexto que está el León es aleatorio, necesita los tres puntos en casa independientemente del oponente que tenga. En todo caso, para sus hinchas es determinante por ser un clásico, pero como se ha dicho muchas veces "para la tabla son tres puntos como los de otro partido".
Desde lo futbolístico, Varela ha alargado en estos días un poco más el plantel. La inclusión como titulares de los volantes Facundo Maldonado y Lautaro Ocampo en Lincoln, fue una muestra. Habrá que esperar si para lo que viene suma alguna otra carta, ya con más días de trabajo junto a sus dirigidos.