En las últimas décadas, la arquitectura en los videojuegos adquirió un rol más profundo y protagónico: transmitir diferentes tipos de emociones a los jugadores, sumergiendo al usuario en la narrativa del juego, sus personajes y los mundos de fantasía en los que habitan.
Si bien en los casos mencionados en Hábitat anteriormente, como SimCity y The Sims, diseñar y construir el espacio es parte del juego, con el paso de los años la arquitectura y el entorno en el que suceden las historias fue adquiriendo cada vez más importancia.
Con los cambios de paradigmas en los videojuegos, hoy vemos que se enfocan especialmente en la experiencia. Los títulos más populares de la actualidad se caracterizan por el concepto de inmersión, es decir, experimentar la realidad virtual, partiendo de una producción artificial.
Es así que la arquitectura interpela al jugador, provocando emociones de todo tipo, influyendo así, por ejemplo, en la toma de decisiones. Juega un papel mucho más importante que ser el telón de fondo, es un componente fundamental para hacer sentir a los jugadores que están en el mundo real, pero con mucha más adrenalina.
Similar a cualquier proyecto de arquitectura, los juegos son "construidos" y tratados con materiales y texturas, detalles que juegan un papel importante en la forma en que los jugadores perciben los espacios. Sin embargo, el valor agregado no es cuán precisa es la ciudad o la calidad HD de los gráficos, sino que lo es la narración de las historias, el viaje y la experiencia de ir de un punto a otro, interactuando con el entorno creado por los diseñadores.
Debido a que los diseñadores trabajan con composiciones 3D en lugar de gráficos 2D, los principios de diseño de interiores ayudan a comprender el espacio y cómo circulan las personas en él; orden (orientación, organización de los elementos para que el jugador comprenda dónde se encuentra en el espacio), enriquecimiento (complejidad y manipulación de la forma, la idea central es estar dentro del espacio) y expresión (la historia o la narrativa hacia el espacio) Todos estos principios deben conectarse entre sí para que el entorno funcione.
Esta categoría incluye videojuegos como Assassin 's Creed, Batman: Arkham Knight, Grand Theft Auto San Andreas, The Last Of Us, entre otros. Títulos en los que si bien la acción es el motor del juego, la belleza de los paisajes y el realismo con el que se han desarrollado los escenarios resulta excepcional.
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